Enric Masip, director del FC Barcelona y mano derecha del presidente Joan Laporta, ha indicado que la estrategia de Real Madrid de quejarse de los árbitros podría estar dando sus frutos. En declaraciones realizadas antes de un torneo benéfico de pádel en Barcelona, Masip expresó su frustración acerca del arbitraje en el partido contra el Inter de Milán.
Tras el encuentro, la indignación en el vestuario culé era palpable, con muchos jugadores lamentando la actuación del árbitro Szymon Marciniak en el Giuseppe Meazza. La molestia se prolongó al día siguiente, cuando Laporta también hizo pública su disconformidad con las decisiones arbitrales. Marciniak ha negado posteriormente algunos de los comentarios que se le atribuyeron sobre el Barcelona, mientras que el Inter se burló de la situación en las redes sociales.
Masip se une a las críticas
Este jueves, Masip no dudó en comentar lo ocurrido: “Desde el tercer minuto, tras una falta fuerte sobre Lamine, el árbitro se dirige a la banca de manera abrupta y comienza a amenazar, creo que a Araujo. Después de lo que sucedió en Milán, hay coincidencias que no suceden por casualidad. El arbitraje fue complicado en todo momento. Es cierto que los árbitros son más susceptibles hoy en día, pero todos deben ser juzgados de la misma manera. No fue intencional, pero hubo una clara diferencia en el tratamiento”, expresó en Marca.
Además, Masip reveló que algunos exjugadores del Real Madrid le han comentado que el penalti a Lamine Yamal fue indiscutible.
¿Funciona la presión del Real Madrid?
En los últimos meses, se ha hablado mucho sobre las quejas de Real Madrid hacia los árbitros, especialmente antes de la final de la Copa del Rey, donde incluso solicitaron un cambio de árbitros. Aunque Masip no mencionó directamente al club blanco, insinuó que sus constantes protestas podrían estar influenciando decisiones arbitrales.
“Contamos con un entrenador que instruye a sus jugadores a no protestar. Debemos evitar ciertos comportamientos. Hay clubes que tal vez han logrado influir en los árbitros con sus quejas continuadas. No es el caso del Barcelona, y no estamos hablando de los árbitros en cada partido, ya que todos podrían quejarse”, apuntó.
“Es verdad que hay partidos decisivos, como el que nos eliminó de la Champions League en Milán, donde una mano clara y un penalti no revisado nos costaron la clasificación. Estos pequeños detalles pueden marcar la diferencia entre los equipos”, añadió Masip.
El Clásico a la vista
Todos los ojos estarán puestos en el árbitro Alejandro Hernández Hernández en el próximo Clásico, un encuentro que podría ser crucial para el destino de La Liga. Ambos clubes ejercerán sin duda presión sobre los oficiales antes del partido.
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