El técnico de Berriatúa alcanza una cifra redonda de partidos siendo entrenador de Osasuna. Nada más y nada menos que 200 partidos oficiales.
A la altura de los más grandes
Asentarse en un club y en una idea de juego que encaje y de resultados hoy en día es muy complicado para cualquier técnico. Jagoba Arrasate, sin embargo, lo ha conseguido y con creces. Ha sabido crear un equipo, con un sello de identidad y con una idea clara que, con nuevos refuerzos y sacando lo mejor de cada uno, va creciendo y aumentando en nivel y rendimiento. Por esas y muchas razones más, Jagoba Arrasate entra en el «olimpo de técnicos» y se convierte en el segundo entrenador con más partidos oficiales dirigidos con Osasuna. Únicamente es superado por Pedro Mari Zabalza con 340 encuentros.
200 partidos de un técnico que ha tenido sus más y sus menos, pero con el que sobretodo ha reinado la ilusión y el orgullo por ver a un equipo que ha ascendido a donde le corresponde y que, después de unos años de mucho sufrimiento, puede volver a respirar y ver su futuro con unos ojos más optimistas.
Gran trayectoria en Pamplona
Un 20 de junio de 2018 llegaba a El Sadar un entrenador experimentado, que había firmado una gran campaña con el Numancia y que tenía la misión de volver a conectar a la afición rojilla con su equipo.
Los rojillos habían vivido una temporada desilusionante en segunda división. Las opciones de entrar en Play-off de ascenso se esfumaron en el último encuentro de la temporada. Por lo tanto, Jagoba tenía una difícil misión por delante; volver a ilusionar a una afición acostumbrada ya a las continuas decepciones. La nueva campaña no comenzó bien, la era Jagoba arrancó con una derrota en Mallorca por 1-0, pero fue una derrota en Tarragona en la jornada 5 la que hizo que la situación se revirtiese. Tras una temporada histórica en la que, los rojillos lograron el máximo de puntos en su historia en una temporada (81 puntos) y no perdieron ningún encuentro en El Sadar, se alcanzó el deseado ascenso. La temporada había sido espectacular y Jagoba había logrado crear una auténtica familia, con una idea de juego muy valiente y unos buenos resultados que le llevaron a lograr el objetivo.
La primera campaña en primera división se esperaba en la parroquia rojilla con grandes expectativas. El equipo se reforzó con jugadores de ataque como Rober Ibáñez y Chimy Ávila. Este último fue quien dio la primera victoria a los rojillos en la élite del fútbol español ante el Leganés. Los de Jagoba lograron llevar una dinámica positiva para no sufrir y la afición rojilla comenzaba a reconocer su gran labor entonando el «Jagoba Arrasate lololo».
En la siguiente temporada, el técnico de Berriatúa tuvo sus vaivenes. Una temporada algo más complicada se avecinaba, porque ya sabemos que los equipos recién ascendidos deben generalmente sufrir para lograr asentarse en Primera. El inicio liguero no fue nada bueno y ello llevó a un equipo que estaba penúltimo en diciembre, con un mar de dudas en todos los aspectos y sin una dirección clara. A pesar de la situación crítica del equipo, la directiva comandada por Braulio Vázquez, decidió darle toda su confianza a quien les había llevado hasta donde estaban. Jagoba logró remontar la mala dinámica de resultados y el equipo acabó la temporada en undécima posición.
En su tercera campaña en Primera división con el conjunto navarro no sufrió en exceso y al igual que la primera temporada siguió una buena dinámica de resultados que, junto a los refuerzos, hacían de Osasuna un mejor equipo. El gran trabajo realizado llevó al conjunto pamplonica a renovar su vinculación con El técnico el 7 de marzo de 2022. De esta forma, llegamos a esta temporada que está siendo, sin duda, la más especial. Refuerzos como los de Moi Gómez o Abde, junto a la buena plantilla que ya había, han hecho que el club esté firmando una temporada excepcional. Con opciones de Conference League y en semifinales de la Copa del Rey, Osasuna está viviendo una temporada de ensueño gracias en gran parte al espectacular trabajo de Jagoba Arrasate durante las cuatro temporadas anteriores.

Fuente: Navarra.com
Jagoba tiene contrato hasta 2024, su futuro será una incógnita, pero mientras tanto es momento de disfrutar del momento, agradecer estos 200 encuentros a quien ha devuelto a este club a la vida y de seguir entonando en El Sadar el «Jagoba Arrasate lololo»