El conjunto albiazul volvió a verse superado por otro equipo y suma cuatro partidos consecutivos sin conseguir los tres puntos.
El Deportivo Alavés volvió a perder la oportunidad de acercarse a la cabeza de la clasificación y suma cuatro jornadas sin saborear un triunfo. El intento de reacción después del gol local, no fue suficiente para empatar el electrónico, pese a las numerosas ocasiones albiazules.
Parecía que este tenía que ser el partido, los resultados de los rivales favorecían y la apuesta de Luis García era clara. Por segunda vez esta campaña, el técnico albiazul apostaba por una doble punta; Villalibre y Miguel eran de la partida. Una apuesta clara por lograr un tanto que acercarse al Alavés a la victoria. No fue así. Asimismo, la primera oportunidad del partido la tuvo Sedlar. Que pese a estar muy cerca de la portería, se encontró con Amir. Un incansable Villalibre en la presión, estuvo cerca de conseguir un penalti, pero aunque el delantero recibió un rodillazo en la cabeza, vio como el colegiado le amonestaba. Un penalti que acabó con amonestación al jugador dignificado.

La segunda parte tuvo un ritmo parecido. La Ponferradina se creció y consiguió ver puerta a la salida de un córner. Un logro que mantenían los albiazules, se vino abajo tras un cabezazo de Hugo Vallejo. La intensidad mostrada por el Alavés incrementó. Un bombardeo continuo a la portería berciana, que no encontró premio. Jugadas a balón parado, disparos, centros y muchas llegadas que mostraron un Alavés incapaz de finalizar las jugadas en el fondo de la red.
Una vez terminado el partido, la decepción albiazul no tuvo precio. Con esta derrotado son 2 puntos de los últimos 12 en juego. Un bagaje de puntos que no concuerdan con las aspiraciones de un equipo en busca del ascenso.